Olivia Paredes

Luego de encontrar diversas problemáticas y necesidades en las escuelas de educación básica donde realizan la práctica, estudiantes de la Licenciatura en Educación del campus Navojoa recibieron capacitación en el Curso Inclusión Educativa, Estrategias para la Educación Especial.

La académica del Departamento de Ciencias Sociales, Lilia Elizabeth Anaya Falcón, detalló que, durante sus estancias en preescolares, primarias y secundarias, los universitarios han detectado alumnos con muchas dificultades de aprendizaje, con condiciones como trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), depresión, entre otros.

“Este curso surge a raíz de una necesidad; nuestros estudiantes detectaron alumnos que tienen necesidades especiales; entonces quieren prepararse, y adecuar sus planeaciones y actividades precisamente para integrar a esos niños y jóvenes.

“La nueva escuela mexicana nos obliga, como docentes, a trabajar en temas de inclusión y la verdadera inclusión es esa, ver la manera de cómo asegurarnos de que todos nuestros alumnos aprendan por igual y buscar estrategias”, describió la docente de las Licenciaturas en Educación y Trabajo Social.

Hacia diferentes estrategias

Precisó que el objetivo del curso es que los universitarios conozcan las diferentes estrategias que pueden implementar en las aulas de educación básica, por lo que se desarrollaron temas como la canalización oportunidad para niños con dificultades especiales, guía de manejo de crisis y trastornos de ansiedad y depresión.

“Han encontrado muchos casos de autismo, TDAH, agresividad, depresión, alumnos aislados que no tienen la confianza para desenvolverse adecuadamente en el salón; y esa es la idea, que nuestros estudiantes puedan brindar esas herramientas y darles seguridad a los alumnos de poder participar e incluirse en las clases, que sean tomados en cuenta”, subrayó.

Anaya Falcón reiteró que la nueva escuela obliga a los docentes a prepararse en temas de inclusión; sin embargo, acentuó, la realidad es que los maestros no buscan capacitarse en este tipo de temáticas.

“Entonces, un tema lo desarrolla la maestra María Fernanda Barba Gómez, de España; y está la doctora Natalia Zárate Camargo, quien tiene especialidad en neuro desarrollo en educación especial; y mañana la conferencia abordará el tema de salud mental.

“Que también es muy importante para que el maestro pueda estar emocionalmente bien y poder hacer su trabajo aún mejor; espero que este tipo de evento se sigan llevando a la práctica, porque nos permiten ampliar más el panorama del docente actual”, añadió.

Durante el arranque del curso, el director Administrativo del campus Navojoa, Jesús Alfredo Rosas Rodríguez, puntualizó que los talleres ayudan a complementar la formación de los universitarios en los diversos aspectos que estudian a lo largo de su carrera profesional.

“En este espacio, nos reunimos con el objetivo de fortalecer nuestras habilidades y conocimientos para crear un entorno educativo inclusivo, que beneficie sobre todo a los estudiantes; el Noroeste de México y en particular la región, Sonora, se caracterizan por su rica diversidad cultural y social.

“Por ello, en este contexto, es fundamental que todos los educadores y profesionales estén preparados para atender las diversas necesidades de aprendizaje, no solo como un derecho, sino como una responsabilidad compartida; y el hecho de que cada uno de los que están en la práctica de campo, en el Servicio Social y Prácticas Profesionales tengan el interés de continuar con su formación, habla de ese compromiso”, resaltó.

Por otra parte, la jefa del Departamento de Ciencias Sociales, María Teresa Gaxiola Sánchez, externó que tanto maestras, como maestros jóvenes, deben tener altos perfiles, con amplios conocimientos que puedan compartirles a los estudiantes en el proceso de enseñanza aprendizaje.

“Fue así como nació este curso, por los alumnos de las doctoras Natalia Zárate Camargo y Lilia Anaya Falcón, asignados como practicantes en las diferentes instituciones educativas, y que tuvieron la oportunidad de observar que hay diversas problemáticas que padecen las niñas y los niños, que son el grupo más vulnerable, los más sensibles, que están más expuestos.

“Ellas, a través de sus practicantes observaron diversas problemáticas y crearon este curso, para capacitarlos y fortalecer las habilidades y talentos que ya tienen, para que puedan atender esas crisis; y que podamos ser respetuosos de los derechos humanos que tienen las niñas y niños en los tratados internacionales, las leyes estatales y nacionales, etcétera”, precisó la docente.