Olivia Paredes
Desarrollar nuevas ideas para contribuir al conocimiento y coadyuvar en la formación de recursos humanos de alto nivel, son acciones que el académico Noé Ontiveros Apodaca, reconocido en el Nivel II dentro del Sistema Nacional de Investigadores, enlista entre sus favoritas dentro de su quehacer diario en la Unidad Regional Sur (URS) de la Universidad de Sonora.
El profesor investigador del Departamento de Ciencias Químico Biológicas y Agropecuarias del campus Navojoa detalló que disfruta estar en el aula y laboratorios, y consideró que su principal aporte a la sociedad sonorense es colaborar en la preparación de los profesionistas.
“Soy de los profesores investigadores que disfruta estar en el aula o el laboratorio de docencia, y esto me lleva a pensar que mi principal aporte recae en contribuir a la formación de nuestros estudiantes; sin duda, tener la oportunidad de desarrollar nuevas ideas para contribuir al conocimiento, pero sobre todo aportar a la formación de recursos humanos de alto nivel, es lo que más me gusta de lo que hago”, indicó.
Para el docente ser actualmente el único en el Nivel II dentro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) representa un reconocimiento valioso que pueden alcanzar o mantener los académicos y que refleja ante la institución, empresa, colegas y la sociedad en general el trabajo que realizan los investigadores como parte de sus actividades profesionales.
“Fue difícil, sobre todo recibir el reconocimiento de Nivel II después de solo un periodo de haber ingresado al Sistema Nacional de Investigadores como Nivel I; debo reconocer que el equipo de trabajo interinstitucional entre la Universidad de Sonora y la Universidad Autónoma de Sinaloa, dirigido por Francisco Cabrera Chávez, quien lamentablemente ya no está con nosotros, y un servidor, fue la piedra angular para alcanzar logros académicos y científicos.
“También debo reconocer el trabajo de nuestros colaboradores en distintos países de América Latina, y que el camino natural a seguir es buscar el reconocimiento de Nivel III, tengo la certeza de que el trabajo en equipo y seguir promoviendo la colaboración nacional e internacional serán detonantes fundamentales para dar el siguiente paso”, explicó.
Ontiveros Apodaca reveló que durante su preparación en el área de la investigación en las Ciencias de la Salud realizó una estancia en el Instituto de Investigaciones Médicas Walter & Eliza Hall, en Melbourne, Australia, lo que le permitió convivir por más de un año con investigadores líderes a nivel mundial y aprender de sus experiencias.
“Considero que este fue un evento que complementó de manera importante mi formación como científico, y por tal motivo siempre estoy en busca de las mejores condiciones para que mis estudiantes de posgrado realicen estancias de investigación y aprendan de las experiencias de otros investigadores”, subrayó.
Asimismo, enfatizó que seguir cosechando logros académicos y científicos no es una tarea sencilla, pues se requiere de dedicación y esfuerzo, pero sobre todo de un equipo de trabajo unido y proactivo, y con integrantes dispuestos a compartir sus conocimientos y poner en práctica sus habilidades.
“Más que un equipo de trabajo, se termina formando una familia, en la que se comparten anécdotas y complicaciones, especialmente momentos emotivos de superación en los múltiples aspectos que giran alrededor de las personas”, enunció.
El también responsable del Laboratorio de Análisis Clínicos e Investigación de la Unidad Regional Sur puntualizó que antes de ingresar a la alma mater, en 2018, realizó actividades como perito químico meritorio en la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado de Sonora, y se desempeñó como profesor de bachillerato, licenciatura y posgrado en diversas instituciones.
“Todas estas etapas fueron experiencias valiosas que me permitieron conocer personas con un gran sentido humano y capacidad para interactuar en los mejores términos; puedo decir que aprendí mucho de mis compañeros y hasta la fecha sigo tomando cada día como un proceso de aprendizaje.
“Hoy me veo como el profesor investigador que se desempeña como químico clínico realizando pruebas rápidas al personal de la Unidad Navojoa en apoyo a un programa institucional, para después retomar sus actividades de investigación; mañana, como el investigador que trabaja de cerca con el equipo de trabajo al cual pertenece, y dentro de algunos años, como una persona que ha alcanzado sus metas profesionales y personales”, concluyó.