A 34 años del terremoto ocurrido el 19 de septiembre de 1985 y dos años del sismo que aconteció el mismo día en la Ciudad de México, pero en 2017, la Unidad Regional Sur (URS) de la Universidad de Sonora realizó un simulacro.
Fue en punto de las 09:45 horas cuando empezó a sonar la alerta sísmica en el campus Navojoa y los más de mil 300 estudiantes del turno matutino comenzaron distribuirse en los tres distintos puntos de reunión: uno en la explanada principal y dos en los estacionamientos.
Académicos, personal de vigilancia, trabajadores administrativos y de confianza guiaron a los jóvenes hasta los lugares que les brindarán seguridad en caso de presentarse un desastre natural real, como ha ocurrido en otros municipios de Sonora o estados del país.
Los jóvenes, por su parte, manifestaron sentirse seguros dentro de las instalaciones de la URS, pues aun cuando no tenían conocimiento de que se trataba de un simulacro, lograron salir con calma de los edificios en poco tiempo gracias a los señalamientos y quienes fungieron como guías.
La vicerrectora Adriana Leticia Navarro Verdugo detalló que este tipo de simulacros no sólo se efectúan para recordar los sucesos que causaron gran impacto en la población mexicana, sino también para crear consciencia en los estudiantes sobre cómo salvaguardar sus vidas.
“Es muy importante que los muchachos tengan conocimiento de lo que deben hacer cuando se presenta un hecho natural como los sismos o cuando ocurre un accidente como lo son los incendios, porque de eso dependerá que estén a salvo”, precisó.
Asimismo, destacó que aunque en esta ocasión formó parte de una actividad que se realiza en todos los campus de la Universidad de Sonora, así como en otras instituciones y dependencias a nivel estatal y nacional, no se descarta la realización de simulacros en distintos momentos del ciclo escolar con el objetivo de mantener alerta a la comunidad universitaria.