Olivia Paredes

Como símbolo del conocimiento y responsabilidad que conlleva el legado de Florence Nightingale para desempeñarse como profesionistas, pasantes de la Licenciatura en Enfermería realizaron la primera Ceremonia del Paso de Luz en el campus Navojoa de la Universidad de Sonora.

La académica Laura Baseliza Escalante Yocupicio detalló que el paso de luz simboliza los inicios de la enfermería y hace alusión a Florence Nightingale, una enfermera británica quien utilizó una lámpara para poder ver a los enfermos durante la guerra de Crimea.

“Para los muchachos significa el paso del conocimiento, de la responsabilidad que como profesionales de Enfermería tenemos que ir dando año tras años en representación del legado que nos dejó Nightingale; son un grupo de estudiantes que ha adquirido durante los últimos 4 años de su formación una disciplina.

“Es una generación que da fin a su trayectoria educativa e inicia con su Servicio Social para concluir la práctica y responsabilizarse totalmente de su quehacer profesional”, enfatizó la docente adscrita al Departamento de Ciencias Químico-Biológicas y Agropecuarias.

Escalante Yocupicio exhortó a los jóvenes a continuar por el camino de la educación, pues a pesar de que termina su ciclo como estudiantes, como profesionistas tienen la responsabilidad de actualizarse de acuerdo con las necesidades y cambios que van surgiendo.

“Inicia el momento en el que estamos en contacto con los pacientes una vez en el campo operativo, hospitalario o comunitario; entonces aquí es donde el alumno se enfrenta a la realidad y donde se ponen a prueba todos los elementos adquiridos dentro de la Universidad al ponerlos en práctica.

“Es donde nos damos cuenta de la necesidad, una vez que la población pone en nuestras manos todas sus necesidades y es ahí donde la responsabilidad da continuidad”, añadió.

Apoya la profesionalización

Por su parte el director administrativo del campus, Jesús Alfredo Rosas Rodríguez, acentuó que la Ceremonia del Paso de Luz celebra el significado profundo y la trascendencia del inicio de la profesionalización de la Enfermería.

“Es un momento simbólico y distintivo en el que nuestros estudiantes, en su arduo camino académico, asumen el compromiso de llevar la luz, cuidado y compasión a la vida de quienes más lo necesitan; cada enfermera y enfermero lleva consigo el compromiso de servir a la humanidad con diligencia y sobre todo empatía.

“En un mundo que enfrenta desafíos sin precedentes en el ámbito de la salud, la labor de las enfermeras y enfermeros adquiere una importancia aún mayor; ustedes están llamados a aplicar sus conocimientos y habilidades en medio de circunstancias complejas, siendo faros de esperanza en tiempos que en ocasiones son de incertidumbre”, dijo.

Al pasar la luz a los estudiantes que completaron o completarán su formación, enunció, se les confía la responsabilidad de continuar con el legado de todos aquellos que han dedicado sus vidas al servicio de los demás.

“Ustedes se comprometen no solo con el ejercicio ético y profesional de la enfermería, sino también con el bienestar y la dignidad de cada persona a la que sirven; en este momento los animo a mantener encendida la llama del compromiso y de la excelencia, a cultivar la compasión y la empatía en cada interacción.

“Y a recordar siempre el privilegio y la responsabilidad que implica ser parte del noble gremio de la Enfermería; felicidades a todos los que hoy reciben la luz y que sigan iluminando el camino con su dedicación y entrega, que este paso marque un inicio de una trayectoria llena de logros y realizaciones”, concluyó Rosas Rodríguez.